martes, 5 de abril de 2011

El monstruo del armario



Este año me he propuesto guardar la ropa de invierno y sacar la de verano. Parece lo más obvio del mundo, y de hecho lo es, pero para mi es un gran reto que año tras año intento superar. La realidad es que nunca lo he conseguido completamente. Y engaño a mi mente repitiéndome una y otra vez que el Mediterraneo trae vientos de entretiempo. Tanto vale un jersey de lana gorda que una minifalda playera y si las mezclas, es hasta trendy y todo. Menudo morro.


Como me da una pereza de cojones ponerme al tema, he decidido ir torturándome cada día levemente para que cuando llegue el gran momento no me parezca para tanto. Vaya, un entreno o, para los que no somos nada deportistas, una buena pesadilla, como se quiera ver. Voy cerrando carpetas y ordenando partes de mi casa que andan pendientes. Poco a poco. Hoy ha tocado una estantería que, mira, al final al ordenarla me ha dado más alegrías que penas de las cosas con las que me he topado. 


Entre las alegrías me he encontrado varios discos de Björk que tenía por perdidos y ahora entiendo por qué. Madre mía, ¡qué post-adolescencia más chunga he pasado y me acabo de enterar! No he sido consciente hasta hoy, que me he cascado los cascos y la estoy escuchando con los oídos como platos. ¡La madre que la parió! Sí que es pesada e intensa la Björk...qué razón tenía Joaquin Reyes en su "Teeeestimonioooooos Hoy Björk" y qué bien la parodió el jodío...: "Hola soy Björk Gün-des-mon-tir..." jajajjajajajajaja




Hoy me he dado cuenta de cuánto amor he recibido de mis amigos, que me han aguantado, canción tras canción, temazo tras temazo, año tras año...y desde aquí agradezco su paciencia. La plasta que yo he dado por la vida con la enana venida del hielo... Se me hace raro renegar, no me reconozco, pero es que estoy acojonaíta viva con lo que estoy escuchando. Con lo que me gustabas y ahora me das tanto miedo como a un niño el Coco. Ya sé como hacen que los nenes de Islandia se duerman o se coman las lentejas. O te duermes, o llamo a Björk.


Para ser justos, digamos que estoy oyendo Volta, uno de sus últimos discos. Yo diría que podría haber sido el último...porque después de esto, poco más se puede hacer. ¡Hey! Pero sigo pensando, y lo diré hasta la muerte, que Debut, Post, Telegram y hasta Homogenic son estupendos y plagaítos de canciones guays. Luego, claro, trabajó con Lars Von Trier y la dejó jodída del todo.


Hoy por hoy escucharla, sin contar sus hits, me parece más duro que un orejón. Pero en mi memoria siempre quedarán esos buenos momentos que hemos pasado juntas tu y yo, amiga Björk. Y si vienes a Barcelona, ¡voy a verte! Por los viejos tiempos.

3 comentarios:

  1. Ay, señor, la lata que diste con la "enana esquimal".... ya hubieras podido tener en aquella época esos cascos que te "cascas" ahora.... jajajajaja.

    Lo que está claro es que en cuanto la oigo o la veo me acuerdo de ti.

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  2. A mi me pasa lo mismo!!! hasta reconozco que tengo un cariño especial por ese look cisne del horror que se plantó en unos oscars o algo asi porque me recordaba a ti y a nuestros años universitarios (no el look,ojo!!!!sino la plasta que diste con su musicota!)
    Jules que te queremos!!!

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  3. Jajajajjajaa! Aaaaaaay, madre, cuánto amor y cuánta paciencia he recibido... GRACIAS!!! OS quieroooooo!!

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